Clamor de labios y piel .
Solo en casa, con una mano bajo la cabeza viendo al techo decido salir a caminar por un café. Saco mis pies de la cama y me pongo unos tenis, lavados los dientes tomo mi celular y salgo de casa con destino desconocido. Era una tarde perfecta de verano en enero; el cielo enrojecido y un poco de brisa soplando en el rostro lo hacían aún más perfecto para despejar la mente. Paso lento, siento vibrar la bolsa de mi pantalón. Veo que tengo un mensaje y es tuyo: -"¿Qué haces?" - Me dijiste. Una sonrisa previa a leerlo se dibujó en mi cara. -Sali a caminar ¿y vos? - Te pregunté de vuelta como parte del protocolo. .... espero.... Re envío el mensaje pues varios minutos han pasado y no contestas. Me desentiendo del teléfono y continuo caminando con destino café. Al ir caminando, la vibración del celular se hace poco perfectible. Mi mente me recuerda revisar (de forma automática) mi bolsillo para ver si tengo algún mensaje y en efecto, ahí estaba el tuyo. -"Nada, estoy sola en cas...